De todas las personas que he conocido en mi vida, sigo poniendo en el número uno a mi abuelo. Y no porque fuese rico, sino porque no había mejor persona que él.

Con su sueldo mantuvo a mi abuela, a sus siete hijos y aún le sobraba dinero para dar en la iglesia y a todas las personas que tocaban a su puerta pidiendo ayuda.

Siempre con una sonrisa en la cara. Pero claro, cuando eres rico es fácil ser feliz.

Admiraba a mi abuelo y quería seguir sus pasos.

Empezó trabajando para diferentes empresas y luego montó su negocio.

En su etapa de empleado ya mantenía a su mujer y a sus siete hijos. Ni siquiera había estudiado una carrera.

Yo terminé mi carrera en Marketing años después de que él falleciera, pero seguía siendo mi referente. Familia, hijos y mucha riqueza, quería ser como él.

Con mi primer trabajo, llegó el primer jarro de agua fría. ¿Cómo iba a mantener a una familia si a duras penas me daba el dinero para el alquiler y comer arroz, huevos y guisantes?

Este no era el camino.

Quizá habían cambiado las cosas y por eso él decidió montar su negocio. Igual con un sueldo ya no se puede ser rico en España.

Mi abuelo montó la panadería del pueblo (menos de 400 habitantes) en el garaje de su hermano.

Vendía 50 hogazas de pan y 30 barras al día.

¿Precio?

1,70€

De lunes a sábado.

1.920 panes.

3.264€ al mes de facturación.

Si le quitamos impuestos y gastos, ¿qué le podían quedar?

¿1.200?

¿1.500€?

Maldita sea.

¿Cómo narices era rico mi abuelo?

Quizá había cambiado todo, excepto los sueldos…

Y así era.

Mi abuelo se podía tomar una copa por 100 pesetas (0,60€).

A mí ahora me cuesta de 8 a 12€.

El metro cuadrado de vivienda valía menos de 300€ (en un pueblo).

Ahora en Valencia supera los 2.000€.

Mi abuelo era rico porque todo era muchísimo más barato.

Y como no podía obligar al mundo entero a bajar los precios, la única solución era ganar más dinero.

Tras años de esfuerzo y ganar muchísimo más dinero que mi abuelo, todavía no llego a su nivel.

Pero seguimos trabajando en ello, porque sigo queriendo familia, hijos y mucha riqueza.

Superamos los 100.000€ de facturación hace años y hemos hecho que lo consigan cientos de clientes.

Los tiempos han cambiado y la forma de hacer negocios también, principalmente por internet y las redes sociales.

Todavía no puedo explicarte cómo hacerte millonario o millonaria, pero he escrito un libro para que puedas llegar a esos 100.000€/año.

Pero igual que mi abuelo, hay una cosa que no ha cambiado. Sigue siendo imprescindible esforzarse.

Mi libro: Esfuércese y hágase rico.

Abrazo.

- Javier

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